Hugo Yasky no se anduvo con rodeos en su reciente entrevista con Víctor Mastrangelo en AM530. El Diputado Nacional fue claro y contundente en su crítica al gobierno de Javier Milei, afirmando que “la crueldad de este gobierno no tiene límites”. Sus palabras resuenan con fuerza en un contexto de creciente descontento social, donde la represión estatal y las brutales medidas económicas parecen ser las únicas respuestas del oficialismo.

Uno de los puntos centrales de la conversación fue la movilidad jubilatoria, un derecho adquirido por los jubilados que Milei ha intentado eliminar con un veto que, de acuerdo con Yasky, podría ser revertido. "Los números para rectificar el veto están parejos", afirmó, y agregó con optimismo: "Si ratificamos los votos, el veto vuela por el aire". Sin embargo, más allá de la cuestión parlamentaria, lo que preocupa a Yasky es el trasfondo de las decisiones gubernamentales, que calificó como "una ostentación de la fuerza" y una demostración de la crueldad que significa "golpear a los jubilados".

Milei, quien asumió con la promesa de llevar a cabo un shock económico para estabilizar la economía argentina, ha centrado sus políticas en un fuerte ajuste fiscal, la reducción del gasto público y la eliminación de subsidios. Sin embargo, estas medidas están teniendo un impacto devastador en los sectores más vulnerables de la sociedad. Los jubilados, en particular, se han visto directamente afectados por el veto a la movilidad jubilatoria, un derecho que garantiza ajustes automáticos de sus haberes según la inflación. Para Yasky, el costo de mantener este beneficio es comparable al del impuesto a las grandes fortunas, una comparación que resalta la injusticia de la política oficial.

Además, las calles están volviendo a ser escenario de protestas sociales, y la respuesta del gobierno ha sido clara: represión. Yasky advirtió que la represión está "multiplicándose" y no tiene otro objetivo que "amedrentar y generar miedo para paralizar a mucha gente". Las recientes imágenes de fuerzas de seguridad golpeando a manifestantes, en su mayoría jubilados, son una muestra de cómo el gobierno de Milei se está apoyando en la violencia para silenciar a quienes se oponen a sus políticas.

El líder sindical también hizo una fuerte crítica al carácter antipopular del gobierno, y no se privó de ironizar sobre las políticas económicas que han generado una disparada en los precios de productos básicos. "Es cada vez más difícil sumarse al club de la milanesa", comentó en referencia a la inflación que ha vuelto inalcanzable para gran parte de la población un plato tradicional como la milanesa. Lo que en otro momento fue un alimento accesible, hoy se ha convertido en un lujo para muchos hogares argentinos.

La estrategia de Milei, según Yasky, parece apuntar a una sociedad dividida y paralizada por el miedo. La represión de las protestas y las políticas de ajuste brutal no son meras coincidencias, sino parte de un plan que busca desmovilizar a los sectores populares y consolidar un modelo económico que favorece exclusivamente a las elites. En este sentido, el veto a la movilidad jubilatoria es solo un síntoma más de un gobierno que no tiene reparos en sacrificar a los más vulnerables para garantizar las ganancias de los más poderosos.

El enfrentamiento entre el gobierno y los sectores de la oposición está entrando en una nueva fase, con la posibilidad de que el Congreso revierta algunas de las medidas más drásticas de Milei. Sin embargo, como advierte Yasky, el panorama es incierto y la mayoría parlamentaria necesaria para revertir el veto a la movilidad jubilatoria podría ser inestable. “En diputados se puede formar una mayoría inestable, tiende a hacerse más factible a medida que el daño que produce este Gobierno va penetrando a distintos sectores de la sociedad”, explicó.

Mientras tanto, la estrategia de Milei parece orientada a una mayor radicalización. Las medidas económicas draconianas no han resuelto los problemas de fondo, y la creciente protesta social es una señal clara de que amplios sectores de la población están llegando a su límite. La represión, lejos de solucionar estos conflictos, no hace más que amplificar el malestar, creando un clima de tensión que podría tener graves consecuencias a corto plazo.

En este contexto, la figura de Yasky se erige como una voz crítica frente a un gobierno que parece haber perdido el contacto con las necesidades reales de la gente. Sus palabras no solo reflejan el descontento de los sectores más golpeados por las políticas de ajuste, sino también una advertencia sobre los riesgos de profundizar la confrontación social. “El gobierno de Milei está mostrando que no tiene límites en su crueldad”, insistió Yasky, recordando que detrás de cada ajuste y cada represión hay personas de carne y hueso que están sufriendo las consecuencias.

El futuro inmediato parece estar marcado por la incertidumbre. Mientras Milei sigue adelante con su agenda de ajustes, la resistencia social también está creciendo. El conflicto entre el gobierno y los sectores populares podría intensificarse en las próximas semanas, y la capacidad del oficialismo para seguir gobernando en este clima de confrontación será puesta a prueba. Los números en el Congreso podrían volverse clave, pero, como bien señala Yasky, el verdadero campo de batalla está en las calles, donde la gente ya no aguanta más.

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— En Orsai (@EnOrsai) September 9, 2024