La Cámara de Diputados del Congreso de la Nación debatió hoy sobre la posibilidad de insistir con la aprobación del proyecto de ley que oportunamente aprobó la reforma previsional otorgando a los jubilados un magro aumento, frente al veto que realizó el presidente Javier Milei para obstruir su promulgación. El resultado fue favorable para el libertario que logró que esa moción sea rechazada y que los jubilados sostengan un ingreso muy por debajo del límite de la pobreza.
Viernes 13 de septiembre de 2024 | 06:01
La normativa que los legisladores aprobaron días atrás establece una recomposición tendiente al 8% que corresponde a la inflación de enero (la que no ha sido reconocida por el gobierno libertario). Además, el proyecto estipula un aumento, previsto para el mes de marzo, conforme la diferencia entre el Ripte (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables) y el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Para entender el alcance nominal de lo propuesto por el Congreso Nacional, una jubilación mínima se encuentra hoy en $225.497,54. En efecto, para aquellos jubilados y jubiladas que perciben dicho beneficio, el aumento implica un monto menor a los $20.000.
El presidente, que en campaña se cansó de prometer que era la casta la que pagaría el ajuste y no la población de a pie, no solo deja al descubierto lo falaz de esa afirmación, sino que decide de manera deliberada golpear a uno de los sectores más vulnerados económicamente por las medidas que su propio gobierno lleva a cabo.
En este contexto, en los últimos días el PAMI, la obra social de los jubilados que cuenta con millones de afiliados, sufrió un nuevo recorte que impactó en la eliminación de la cobertura al 100% de múltiples medicamentos.
No obstante, nada se sabe sobre el destino de los recursos que el gobierno nacional elige negarles a los adultos mayores que aportaron durante toda su vida a la hoy Administración Nacional de la Seguridad Social. Y ello, sin olvidar que el próximo domingo, el primer mandatario presentará en el Congreso el presupuesto anual por el que solicitará al Congreso que lo autorice a gastar alrededor de cien mil millones de dólares.
En ese marco, la decisión de vetar un aumento irrisorio a los jubilados, teniendo en cuenta los números arriba mencionados, resulta un acto de extrema obscenidad, sorprendiendo la velocidad con la que el gobierno de la Libertad Avanza adhirió a las reglas del juego de la casta política a la que se cansó de denostar públicamente.
Varios diputados de la Unión Cívica Radical, que habían acompañado en el recinto la aprobación de la mentada ley, hoy votaron en favor del veto presidencial efectuado por el mandatario. En el medio pasaron solo algunos días, lo que desencadena un sinfín de interrogantes: ¿cuáles son los favores que se hicieron mutuamente el gobierno y los radicales?, ¿qué intereses se intercambian?
Tanto la decisión de vetar un magro aumento para los jubilados, como las negociaciones en tiempo record con los integrantes del bloque radical en la cámara baja dan cuenta de una única certeza: la casta política se mantiene intacta y el presidente es actualmente su principal garante.
ANÁLISIS PROFUNDO
— En Orsai (@EnOrsai) September 12, 2024
La caída de la UCR y el desprecio del gobierno de Milei hacia los Jubiladoshttps://t.co/apleTkvoq7