Ricardo Forster, filoso, escritor y asesor presidencial, en comunicación con el equipo de #NoNosQuedaOtra AM 740 Radio Rebelde. La necesidad de reconstruir un lenguaje que luche contra al sentido común construido por el neoliberalismo; los medios alternativos como el contrarrelato; los debates y la liberación de presos políticos.

Reconstruir el lenguaje que vació el macrismo

“El efecto de los cuatro años del macrismo no ha dejado prácticamente nada sin tocar de una forma dañina. No hay ámbito de la vida social, económica, cultural e institucional que no haya sido lastimada por una política horrible, con una mezcla de bestialidad e incapacidad. El macrismo deja índices horribles en casi todos los órdenes. Ha generado un compromiso que el país ahora tiene que tratar de renegociar, en términos de deuda externa, que si no se logra, limita toda posibilidad de salir de este agujero negro donde efectivamente quedó el país. No hay que pensar que hay un ámbito más lastimado que el otro y hay que trabajar en función de la necesidad imperiosa de que la Argentina se recupere en beneficio de los dañados por las políticas del macrismo, que es la inmensa mayoría y sobre todo los más humildes”.

“Entonces, ahora se trata de reconstruir un lenguaje político, la gestión pública, proyectos de transformación, de desendeudamiento, recuperación de ámbitos claves para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía: pienso en ANSES, PAMI, etc. Servicios públicos que habían llegado a convertirse en una suerte de piraña de los recursos de las familias argentinas. Todo eso requiere un camino, requiere un proyecto, y sus tiempos”.

Los medios hegemónicos que insisten con el ajuste

“Hace más que un mes que estamos trabajando y nos reunimos con Alberto y otros equipos sobre un tema clave de la ciencia social, filosofía e historia, que es la cuestión del lenguaje. El lenguaje es siempre performativo; esto quiere decir que las palabras no son neutras, objetivas y que no producen realidad: claro que producen realidad, producen sentido común, construyen subjetividad; definen núcleos de poder y definen lo que se incluye y se excluye“.

“LA PALABRA AJUSTE LA VOLVIERON A UTILIZAR, PARADÓJICAMENTE, PARA PONER EN DISCUSIÓN LA LEY QUE EL GOBIERNO, EN LAS SESIONES EXTRAORDINARIAS, VOTÓ PARA AVANZAR EN UN PROCESO DE RECONSTRUCCIÓN PARA ESTOS DÍAS DE EMERGENCIA; A ESO LO TRANSFORMARON EN UNA PALABRA ESPANTOSA: “AJUSTE”. ESTO, POR SUPUESTO, BAJO LA LÓGICA DEL CINISMO Y LA HIPOCRESÍA”

Escuchá la entrevista completa:

“También podríamos pensar, en otros términos, en la palabra cepo: haber transformado un instrumento de regulación cambiaria vital para un gobierno democrático en algo equivalente a un instrumento de tortura es el triunfo del establishment y del neoliberalismo y de todos aquellos que odian que el Estado intervenga en la economía, regule los mercados o controle. La disputa por el lenguaje es un punto clave y ni hablar si la palabra la toma el presidente de la Nación, una palabra cargada de contenidos, que da señales muy contundentes y que la sociedad traduce de diferentes modos. El lenguaje se tiene que recrear para no abusar, gastarse, para no perder capacidad de fuerza y eficacia”.

“Tomar una palabra como solidaridad implica volver a llenarla de contenido, porque si algo hace el neoliberalismo es ser un mecanismo gigantesco de transformación del sentido común, de la subjetividad y el modo de constituirse de las propias sociedades. Es precisamente vaciar el contenido de palabras normativas, fuertes y entrañables. Este es el trabajo que hay que hacer, volver a llenarlas de contenido”.

Cómo instalar otro tipo de debates

“La experiencia histórica para nosotros es clave. El grupo está conformado por una historiadora, por un antropólogo social, una politóloga, y un filósofo; por lo tanto leer el pasado y su impacto en el presente, y el modo en cómo el presente traduce el pasado. ¿Te acordás cuando cayó la crisis de la 125?, ellos lograron instalar una palabra que tuvo un efecto abrumador y destructivo para las políticas del gobierno de aquél entonces, que fue la palabra “el campo”: al instalar esta palabra lo transformaron al campo en una gran familia Ingalls, establecieron una relación de intercambio entre un miembro de la Sociedad Rural y un pequeño chacarero del sur de Santiago del Estero; hicieron que el dueño de 10 mil hectáreas en la zona núcleo fuera equivalente a un fruticultor de 5 hectáreas en Entre Ríos y así podríamos seguir. Eso implicó que una parte de la sociedad que nunca había establecido ningún vínculo con el mundo agrario, salvo teniendo alguna maceta en el balcón, se identificó con la sociedad rural, con la mesa de enlace y con una disputa que implicaba que la clase media, los sectores populares iban a perder si la mesa de enlace le imponía las condiciones y el tipo de país que la mesa de enlace quería, que no es muy distinto al país que implementó el macrismo”.

“Entonces por eso es fundamental y le importa mucho a Alberto lo que está pasando en términos de la sociedad, y no solo la sociedad argentina, sino también a nivel global: estamos viviendo momentos muy complejos que incluyen lo ambiental, la emergencia poderosísima del feminismo y su capacidad de transformar la vida cotidiana, la transformación de los jóvenes, el cambio climático; que vuelva a aparecer hoy en boca de la nueva jefa del Fondo Monetario Internacional la palabra desigualdad como un problema del sistema cuando el sistema trabajó para profundizar la desigualdad. Nosotros modestamente lo que tratamos es de ordenar esa catarata de acontecimientos y decisiones que requieren parar la pelota, mirar los costados, y no enloquecerse”.

Presos políticos

“Alberto argumenta que hay una arbitrariedad judicial, que los presos están ilegalmente presos porque no se han garantizado sus derechos y que hay que recorrer esos caminos lo más rápido que se pueda para que los presos que ilegalmente han sido detenidos con absolutas falencias en la trama de sus respectivos juzgamientos tengan el derecho a la libertad mientras no se recorran todas las instancias. En el caso de D’ Elía, que es un querido amigo, me parece que es fundamental dar una pelea. Él está preso por haber ejercido el derecho popular a indignarse ante el asesinato de un dirigente popular y también por el intento de controlar el modo en cómo se expresa la bronca del pueblo”.

“TODOS ESTAMOS ESPERANDO QUE LOS TIEMPOS SE ACELEREN, QUE SE TOMEN DECISIONES Y QUE PODAMOS DECIR QUE NO HAY DETENCIONES ILEGALES Y ARBITRARIAS, Y EN EL CASO DE DETERMINADOS COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS, PRESOS POLÍTICOS EN ARGENTINA”

“Alberto es muy cuidadoso. Él cree enfáticamente que es indispensable avanzar en una reforma integral de la justicia, sobre todo el de la justicia federal y se está trabajando contrarreloj para ver si se puede poner en el debate parlamentario, pero por supuesto que Alberto está absolutamente ligado a la idea de una justicia que se ha vuelto arbitraria y que representa a intereses corporativos como es Comodoro Py. Me parece que analizando otras circunstancias, que tiene que ver con el escenario en el que estamos, él hace esa lectura y cree que es la más adecuada en el momento en el que estamos”.

La necesidad de medios populares

“Es una necesidad imperiosa, sabiendo que es una lucha desigual. Los medios de comunicación concentrados y poderosos son un núcleo clave de la revolución cultural del neoliberalismo desde los años ’80 y a lo largo de estas cuatro décadas. Sin ellos es imposible imaginar que un proyecto tan brutal de despojamiento, como es el neoliberalismo, hubiera podido desplegarse con tanta fuerza y generar lo que generó. Esto significa que la lucha es desigual, a contra corriente pero indispensable. No hay proyecto de ampliación democrática, de profundización de la igualdad, de emancipación, si no se construyen también proyectos comunicacionales, transformaciones culturales e interpelaciones a un nuevo sentido común. No hay garantías de que uno logre eso pero sí es imprescindible hacer lo posible para dar una batalla con posibilidades ciertas en ese ámbito”.