El Sumo Pontífice se manifestó molesto con aquellos que lo vinculan al marxismo por su compromiso con los pobres. "Jesús les diría hipócritas", lanzó para criticar a quienes hacen una utilización de los sectores más vulnerables de la sociedad.
Martes 28 de octubre de 2014 | 15:15
"Si hablo de tierra, techo y trabajo, para algunos resulta que el Papa es comunista", afirmó enojado Francisco. Es que su oposición en el Vaticano y las derechas de todo el mundo le cuestionan su prédica en favor de los pobres y los cuestionamientos a un capitalismo que se ha vuelto depredador.
"La palabra solidaridad, que no cae bien, es un modo de hacer la historia y eso hacen los movimientos populares", agregó Francisco en el encuentro mundial de movimientos populares.
Asimismo, Francisco cuestionó a aquellos que utilizan "estrategias de contención que únicamente tranquilice y convierta a los pobres en seres domesticados e inofensivos" y agregó: "Triste ver cuando detrás de supuestas obras altruistas se reduce al otro a la pasividad, se lo niega o, peor, se esconden negocios y ambiciones personales".
"No se contentan con promesas ilusorias, excusas o coartadas. Tampoco están esperando de brazos cruzados la ayuda de ONGs, planes asistenciales o soluciones que nunca llegan", agregó.
Francisco, otrora Jorge Bergoglio, fue militante del peronismo en Guardia de Hierro; las frases que aseguran que el Papa es peronista son, en rigor, ciertas. El comunismo no está en su ADN ni persona ni político, sin embargo, las patrullas neoliberales que aún acosan al mundo, lo tildan de comunista.
"Ninguna familia sin vivienda, ningún campesino sin tierra, ningún trabajador sin derechos, ninguna persona sin la dignidad que da el trabajo", lanzó nuevamente en una alocución con un fuerte contenido de peronismo que ahora incomoda a las oligarquías globales.
"Qué lindo es cuando vemos en movimiento a pueblos, sobre todo, a sus miembros más pobres y a los jóvenes. Entonces sí se siente el viento de promesa que aviva la ilusión de un mundo mejor. Que ese viento se transforme en vendaval de esperanza", concluyó.