Oportunamente el Gobierno había anunciado un acuerdo con las empresas petroleras para no subir los precios durante unos ocho meses. El acuerdo que encabezó el ministro de Energía, Juan José Aranguren, sostenía que "la firma, como medida de excepción, permitirá mitigar el efecto de las variaciones de costos mencionadas, propiciar una adecuación más paulatina de los precios locales de los combustibles y atenuar la incidencia de tales variaciones en los precios de la economía, en favor del interés económico general".

Sin embargo, unas semanas después los precios volvieron a aumentar. Se debe a una serie de actualizaciones de impuestos que aplicó la AFIP y que las empresas trasladaron a los surtidores.

Pero además, las nuevas subas fueron autorizadas por el propio Aranguren, con quien habían firmado el documento para mantener los precios. De esta manera, los aumentos ya se pagan en los surtidores entre un 4,5% a un 5%.

Una vez más, el Gobierno volvió a mentir sobre los no aumentos de precios y los automovilistas deben hacer frente a una nueva escalada de precios.

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— En Orsai (@EnOrsai) June 3, 2018