Porque detrás del poker se esconden estrategias, decisiones, análisis, control de las emociones. Se esconden toda una serie de características y habilidades que pueden trasladarse a multitud de zonas de la mesa de juego. ¿Un buen ejemplo de esto? Los negocios. Jugar al póquer puede ser un gran entrenamiento mental para los ejecutivos de empresas, y aquí lo vamos a probar sobre el terreno para demostrarlo, pero también para descubrir lo útil que puede resultar jugar.

Esto fomenta las habilidades de póquer para los ejecutivos.

Si es ejecutivo, es posible que desee continuar leyendo, pero también encontrar un lugar donde practicar para desarrollar estas habilidades. La mejor manera de hacerlo es encontrar una plataforma de juegos de póquer donde puedas jugar gratis, como la que acabamos de abrir. Entonces tendrás la posibilidad de jugar desde el teléfono o el ordenador, tanto con apuestas gratuitas como de pago. Todo online y de forma cómoda para que juegues cuando quieras y puedas seguir desarrollando tus habilidades con los que llevan a tu empresa más alto y mejor, sin tener que divertirte en el camino.

¿Cuáles son estas habilidades efectivas que se desarrollan al jugar al póquer? Hay muchos, pero sin duda los más importantes son los que verás en la secuela:

Tomar decisiones bajo presión

Aprender a tomar decisiones en situaciones de presión es algo necesario sobre el terreno a la hora de gestionar una empresa, incluso antes de empezar a abrirla. Esta es una de las habilidades más importantes a emprender , porque una empresa siempre tendrá situaciones de presión, y es muy importante saber analizarlas con detenimiento y poder dar una respuesta rápida, efectiva y confiable.

Esto es una constante en el poker, porque cada partida está llena de incertidumbre y hay que decidir qué hacer en cada ronda con la apuesta en función tanto de las cartas que tienes como de las reacciones de los demás jugadores. La experiencia aquí se traslada con maestría al ámbito profesional, adaptando tu mente para abordar estas situaciones con mayor naturalidad y agilidad.

Inteligencia emocional

Si hay algo claro en los negocios es que las emociones deben quedar fuera, porque pueden nublar la mirada crítica y analítica, subjetivizándola y provocando que las decisiones se tomen por instinto y no por razón. En el póquer, esta es una habilidad esencial, porque se utiliza para analizar tanto las emociones propias como las de los demás.

Esto último también es importante, porque la inteligencia emocional sirve para saber liderar equipos con buenas manos, conociendo sus necesidades y pudiendo hacerlo con facilidad y sabiendo actuar en consecuencia para poder remar juntos hasta el éxito.

Habilidades de negociación

En el póquer no se negocia con otros jugadores, pero se desarrollan ciertas habilidades de persuasión y lectura de intenciones. Lee todas las expresiones, gestos y jugadas de los rivales y actúa en consecuencia para llevarlos por el camino que quieres ganar. Esto, que se hace a través de cartas y declaraciones, se traslada perfectamente al ámbito empresarial.

Porque, de hecho, en los negocios es necesario negociar. Ver las intenciones de los demás y saber guiarlos hacia donde quieran es fundamental para que la empresa siga el camino que desea con negociaciones sólidas y beneficiosas.

Adaptabilidad y resiliencia

No todas las manos serán buenas en el póquer, no todos los jugadores saldrán bien. Un giro inesperado o una jugada mal leída puede cambiar por completo el resultado del partido, y esto requiere que te adaptes, sepas manejar el cambio e intentes aprovecharlo a tu favor para ganar. Los cambios estratégicos son muy comunes en el poker... y en los negocios.

Un producto que no se vende como se esperaba, una negociación que acaba fracasando, o todo lo contrario. Son situaciones que pueden darse en las empresas, y para las que el poker prepara a la perfección con su dinámica de partido.

Hay muchas más habilidades para los ejecutivos que se pueden desarrollar jugando al poker, pero sin duda estas son las más importantes e influyentes. Un juego de póquer realmente puede entrenar a un jugador para tomar decisiones, analizar a otras personas y saber cómo actuar rápidamente cuando las cosas se ponen difíciles. Podrás prepararte muy bien para tomar decisiones y desempeñar puestos de responsabilidad en las empresas. Y, como decíamos antes, lo mejor de todo son habilidades que se aprenden jugando, divirtiéndose.