La reducción de cargas patronales perjudicará a más de 13 millones de trabajadores

(Por Walter Onorato - @WalterOnorato) Los aportes patronales son fundamentales para financiar la seguridad social, incluyendo la jubilación, el seguro de desempleo, la atención médica y otros beneficios. Si los aportes no se realizan, el trabajador puede quedar desprotegido y sin acceso a estos importantes beneficios. Eso todos lo sabemos pero aún así un sector importante de la sociedad vota esta alternativa.

En principio podríamos destacar la menor Protección Social que significaría la reducción de las cargas patronales al disminuir los fondos destinados a la seguridad social y a otros beneficios para los trabajadores, como por ejemplo las prestaciones de salud y la misma jubilación. Señalemos que si los aportes patronales no se realizan, los trabajadores van a enfrentar dificultades al momento de jubilarse, ya que sus contribuciones a la seguridad social pueden ser insuficientes para obtener una jubilación adecuada.

Tampoco podemos olvidar que los aportes patronales son los que financian el sistema de seguro de desempleo. Si estos aportes no se realizan, el trabajador puede quedarse sin acceso a esta importante red de seguridad económica en caso de pérdida de empleo.

También repercutiría en una disminución de los recursos para Programas de Empleo y Formación. Esto significa que si los empleadores pagan menos cargas patronales, puede haber menos recursos disponibles para programas de capacitación, formación y desarrollo de habilidades para los trabajadores que es fundamental para el desarrollo industrial y tecnológico de las empresas.

La disminución de las cargas patronales puede influir en la estabilidad laboral de los trabajadores, ya que los empleadores pueden sentir menos presión económica para mantener empleados a largo plazo. La posibilidad de tener menores compromisos económicos aumentaría la inestabilidad laboral de los trabajadores que quedarían expuestos al capricho de los empresarios.

Como consecuencia de todo lo expresado anteriormente afectaría negativamente en los Salarios de los trabajadores. Si los empleadores tienen menores costos laborales, es posible que algunos de ellos no trasladen esos beneficios a los salarios de los trabajadores, lo que podría resultar en una estabilización o disminución de los salarios reales. ¿Un trucazo, no?

Párrafos arriba ya había mencionado que los empleadores pueden estar más inclinados a contratar o despedir empleados de manera más rápida, generando un aumento de la competencia en el mercado laboral como consecuencia de los costos laborales menores. El temor a los despidos genera un debilitamiento de los salarios que ante el temor de quedarse sin trabajo, el empleado aceptaría silenciosamente.

Si se reduce la presión financiera sobre los empleadores, algunos podrían estar más tentados a recurrir a formas de empleo precario o a contratos temporales, lo que podría afectar la estabilidad y seguridad en el trabajo. Esta potencial precarización laboral abriría las puertas a los contratos basuras de la década de los 90 y la reaparición de las nefastas Agencias de Trabajo que se quedaban con una parte del salario de los trabajadores sólo por el servicio de terciarización.

Otro dato a tener en cuenta, de la propuesta de Milei, es que los trabajadores dejarían de calificar para la obtención de Créditos y Préstamos. En las instituciones bancarias y financieras, el historial de aportes patronales es considerado fundamental a la hora de evaluar la capacidad crediticia de un individuo. La falta de aportes les va a afectar negativamente la capacidad del trabajador para la obtención de créditos afectando directamente en sus proyectos personales.

Esto es un breve punteo de las consecuencias que traería para la vida de los trabajadores las propuestas realizada por Javier Milei. No estamos haciendo futurología, están expresadas en su plataforma electoral y además ya tenemos la experiencia de la década Neoliberal de la presidencia de Carlos Saul Ménem y su ministro de economía Domingo Cavallo. Datos son los que sobran.