La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, incremento las tensiones en el espacio al reconocer que esperaban superar el 50% de los votos en la Capital Federal.
Por Portal de Noticias // Viernes 19 de noviembre de 2021 | 10:17
Los resultados de las elecciones generales dejaron un sabor amargo para la oposición y la interna de cara al 2023 se recrudece. Este jueves la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, reconoció que en Juntos por el Cambio tenían la expectativa de superar el 50% de los votos en la Ciudad de Buenos Aires y por ese motivo algunos dirigentes no estuvieron eufóricos en los festejos del domingo.
Ante una repregunta de Luis Novaresio, la ex ministra de Seguridad aseguró: “Esto no lo digo yo, lo dicen los diarios, es por la expectativa que teníamos de superar el 50%, que es lo que objetivamente pasó”.
Cabe destacar que la dirigente quiso competir en primarias con María Eugenia Vidal para quedarse con el primer lugar de la nómina de postulantes de Juntos por el Cambio en la Capital Federal, pero el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, apostó por otra estrategia.
La ex funcionaria del gabinete de Mauricio Macri reconoció además que el domingo a la noche hubo algunas tensiones porque se generó “una confusión” sobre la presencia de los integrantes de la Mesa Nacional de la coalición opositora en las celebraciones que se realizaron arriba del escenario. Crónicas periodistas reflejan que hubo discusiones que originaron la intervención de guardias de seguridad para organizar quién podía subir al púlpito y quién no.
“Eso se corrigió al otro día, con todos los gobernadores, los presidentes de bloque y los presidentes de los partidos, con la reunión que se realizó en Palermo. Lo del búnker son cosas que pasan cuando tenés distintos sectores compartiendo el mismo espacio”, reflexionó.
Bullrich rechazó además las declaraciones de Macri, quien señaló que ahora se inicia una transición hasta un posible próximo gobierno de Cambiemos y explicó que en vez de hablar de candidaturas, el espacio debería enfocarse a ampliar su base con la incorporación de liberales y de otros sectores y a penetrar en sectores humildes, donde históricamente el voto les es esquivo.