La multinacional estadounidense se dedica a gráficas decorativas. Es proveedora de terminales como Ford y Toyota. Sustituiría la fabricación nacional por insumos importados básicamente desde Brasil.
Por Horacio Alonso / ambito.com // Miercoles 21 de agosto de 2019 | 13:23
En medio de la crisis que se vive en el sector automotor, la multinacional estadounidense 3M está analizando cesar la producción de su división automotriz que provee insumos a terminales como Toyota y Ford. La idea es suspender la actividad en la planta de la localidad bonaerense de Hurlingham para seguir suministrando productos desde Brasil. Ese establecimiento se dedica a la fabricación de gráficas decorativas que se utilizan en los exteriores de los vehículos.
La decisión está siendo evaluada desde hace meses por la compañía y, según pudo saber este diario, será difícil revertirla. Tanto es así que distintas fuentes del sector confirmaron la salida de esta autopartista. Incluso, trascendió que las automotrices que reciben sus insumos ya están validando productos importados para cubrir el faltante de la producción local. En estos días, se estaría realizando una producción mayor para tener un stock que impida el desabastecimiento durante el traspaso del producto nacional e importado. Hubo gestiones por parte de las automotrices involucradas y de proveedores de 3M para que sigan fabricando en el país pero no encontró eco en la casa matriz.
Este diario intentó comunicarse con la empresa para confirmar la información pero desde la compañía prefirieron no hacer comentarios.
La decisión de 3M se sumaría a la de otras autopartistas que en los últimos tiempos han cesado su actividad o están en proceso de cierre. Hutchinson, Clapp, Faurecia, Brembo, Mattioli, Metalúrgica Tandil, con algunos de los ejemplos.
En algunos casos se debe a la situación de la crisis local que disminuyó los niveles de actividad de estas empresas por la menor producción de autos. En otros casos, estuvieron afectados por decisiones de las terminales automotrices de dejar de producir determinados modelos en el marco de una reestructuración internacional pero, también, algunas de estas decisiones se tomaron por un cambio en la estrategia global de la casa matriz de la autopartista, en su mayoría multinacionales.
En cuanto a los problemas locales, el derrumbe del mercado interno impactó fuerte en este sector sumado a los altos costos de producción que les impide ser competitivos. Esto hace que no puedan sumar nuevos proyectos porque el costo local de fabricación de las piezas es mayor al que se tiene en otros mercados. “Es más barato producir en Brasil e importar que fabricar en la Argentina” reconocieron a Ámbito Financiero desde una de las empresas afectadas. Es por eso que varias de estas empresas sustituirán la producción local por productos que importarán de Brasil
En los últimos años, hubo un crecimiento en la participación de autos importados en el mercado interno. Hoy más del 70% de los 0 km que se comercializan llegan del exterior, especialmente desde Brasil. La parte restante – menos del 30% - se abastece con vehículos de producción local pero que, a su vez, tienen 70%, en promedio, de autopartes importadas. Los fabricantes locales de piezas tienen que limitarse a abastecer a sólo un 10% de los vehículos que se venden aproximadamente.