El gobierno de Axel Kicillof anuncia un ambicioso plan de inversión en infraestructura vial, con obras en la Ruta 2 y la Autopista Buenos Aires-La Plata. Los proyectos, que abarcan repavimentación y ampliación de carriles, buscan mejorar la seguridad, el acceso y la eficiencia en el transporte, bajo la premisa de una gestión estatal con miras a la innovación y la sustentabilidad.
Redacción EnOrsai // Miercoles 30 de octubre de 2024 | 07:09
En un contexto donde la infraestructura vial cumple un rol central en el desarrollo de una economía dinámica y segura, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires, liderado por Axel Kicillof, ha anunciado un plan ambicioso de inversión en la mejora de rutas y autopistas. Bajo la administración de la empresa estatal Aubasa, se destinarán 332 millones de dólares a un proyecto que apunta no solo a modernizar sino también a ampliar las capacidades de tránsito en algunos de los principales accesos viales de la provincia.
Las obras, que se extenderán durante los próximos tres años, incluyen la ampliación de tramos clave en la Autopista Buenos Aires-La Plata y la repavimentación de la Ruta 2, una de las arterias de mayor importancia turística y comercial, que conecta la capital provincial con la ciudad de Mar del Plata. Con este plan, el gobernador Kicillof no solo busca optimizar el tránsito y la seguridad vial, sino que reafirma la importancia de una gestión estatal comprometida con la innovación y la sustentabilidad.
La Autopista Buenos Aires-La Plata: Seguridad y acceso ampliado para los usuarios
La Autopista Buenos Aires-La Plata, que desde hace años opera como el principal corredor entre la capital provincial y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, será objeto de una ampliación significativa en sus tramos más críticos. El primer proyecto incluye la construcción de un cuarto carril en el tramo que va desde Hudson hasta el Acceso Sudeste, una extensión de 36,6 kilómetros que, con un costo estimado de 36 millones de dólares, beneficiará a miles de usuarios que utilizan esta ruta a diario. Este proyecto, con una duración aproximada de un año, comenzará en 2025 y promete aliviar el tránsito en una de las zonas más congestionadas de la provincia, especialmente en horas pico y en períodos de gran afluencia turística.
Además de esta ampliación, se llevará a cabo la incorporación de un tercer carril en el tramo entre La Plata y Hudson, cubriendo una extensión de 20 kilómetros. Este segundo proyecto, que implicará una inversión de 20 millones de dólares y un plazo de ejecución de 10 meses, permitirá que la autopista se adapte a las crecientes demandas de tránsito de los usuarios y contribuya a una circulación más segura y fluida.
Ambos proyectos de ampliación son fundamentales no solo desde la perspectiva del desarrollo económico y el turismo, sino también para garantizar un acceso eficiente y seguro a quienes transitan esta vía en su día a día. José Arteaga, presidente de Aubasa, expresó que el principal objetivo de estas obras es optimizar la infraestructura y mejorar la seguridad del servicio, lo cual se logrará mediante la incorporación de tecnología de última generación, con una visión de largo plazo que considera tanto la innovación como la sustentabilidad como pilares centrales.
La repavimentación de la Ruta 2: Modernización en el acceso a la Costa Atlántica
La Ruta 2, arteria clave que conecta la ciudad de Buenos Aires con Mar del Plata, también recibirá mejoras significativas. Se repavimentarán ambas manos de circulación a lo largo de 200 kilómetros, en el tramo que abarca desde Dolores hasta Mar del Plata. Esta obra, que tendrá un costo estimado de 113 millones de dólares, es vital para mejorar la experiencia de los usuarios que transitan por esta ruta, especialmente durante los fines de semana y las temporadas de verano, cuando el flujo hacia la Costa Atlántica aumenta considerablemente.
Las autoridades han destacado que este proyecto no solo responde a la necesidad de mantener una infraestructura en buen estado, sino también a la importancia de dotar de mayor seguridad a una de las vías más transitadas de la provincia. Con la repavimentación, el bacheo y la demarcación de este tramo, se espera minimizar los riesgos de accidentes y mejorar el confort de quienes transitan esta vía. En paralelo, se prevé un impacto positivo en el turismo regional, uno de los motores económicos de la provincia, facilitando un acceso más seguro y eficiente a las localidades costeras.
Infraestructura vial y el rol estratégico del Estado
Este plan de infraestructura no solo plantea una mejora en la red vial provincial, sino que también reafirma el papel de Aubasa como una empresa pública comprometida con el desarrollo y la eficiencia en la gestión. Carlos Bianco, ministro de Gobierno bonaerense, señaló que la empresa se ha posicionado como una entidad superavitaria, capaz de autofinanciarse y de generar los recursos necesarios para llevar adelante estas políticas de inversión. Bajo esta gestión, Aubasa no solo ha cubierto sus gastos operativos y salariales, sino que ha demostrado su capacidad para impulsar grandes obras de infraestructura que beneficien a la comunidad en general.
La expansión y modernización de la red vial provincial responde a una visión de desarrollo que considera la infraestructura como un motor para el crecimiento económico y la mejora en la calidad de vida de los habitantes. En un contexto donde el gobierno de Javier Milei ha cuestionado la intervención estatal en la economía, esta apuesta de Kicillof por una infraestructura gestionada por el Estado representa una alternativa contundente y necesaria. La estrategia de financiamiento mediante una empresa pública permite, además, evitar los endeudamientos onerosos y la dependencia de capitales privados que, en otros contextos, han demostrado ser costosos y con resultados inciertos.
Innovación, seguridad y sustentabilidad como ejes de la inversión
Las obras de ampliación y repavimentación anunciadas se enmarcan en una política de inversión que coloca la seguridad y la innovación como prioridades centrales. La incorporación de tecnología de última generación en la Autopista Buenos Aires-La Plata, así como las mejoras en la infraestructura de la Ruta 2, son parte de una estrategia orientada a largo plazo, que considera la sustentabilidad como un elemento clave en la gestión vial. La apuesta por una infraestructura moderna, segura y sostenible refleja el compromiso del gobierno provincial con una gestión que priorice tanto las necesidades actuales como las futuras de los bonaerenses.
El impacto de estas obras no solo se limita a la mejora en la experiencia de los usuarios y en la reducción de accidentes, sino que también contribuye a potenciar el turismo y el comercio, sectores que dependen en gran medida de una infraestructura eficiente y bien mantenida. En un país donde la infraestructura vial ha sido históricamente deficiente y ha carecido de inversiones sostenidas, el plan de Kicillof representa un avance significativo hacia un modelo de gestión estatal que promueve el desarrollo y la seguridad sin renunciar a los principios de sustentabilidad e innovación.
El plan de obras viales impulsado por Axel Kicillof y gestionado por la empresa estatal Aubasa refleja una política que considera la infraestructura como un derecho y no como un bien lucrativo en manos de capitales privados. En un contexto donde las políticas de austeridad y el recorte estatal amenazan con limitar el desarrollo de obras públicas, esta inversión en infraestructura vial plantea una alternativa sólida, que prioriza la seguridad, el desarrollo y la eficiencia en la gestión de los recursos públicos. Con un enfoque en la innovación y la sustentabilidad, el gobierno bonaerense reafirma su compromiso con una gestión estatal que busca no solo mejorar la calidad de vida de los habitantes, sino también impulsar el desarrollo económico y social en toda la provincia.