En un tono personal, Massa compartió detalles de sus orígenes familiares, destacando la travesía de sus padres durante la Segunda Guerra Mundial y su infancia en San Martín. Subrayó que proviene de la clase media argentina y enfatizó que su trayectoria no tiene raíces políticas, sino que es el resultado de su identificación con esta realidad. A la temprana edad de seis años, ya anhelaba ser presidente, un sueño que forjaría a lo largo de su carrera política desde una edad temprana.

Diferenciándose de sus contrincantes, Massa defendió la grandeza de Argentina y rechazó las críticas negativas hacia el país. Subrayó los recursos naturales, el talento y la intelectualidad de su gente como elementos distintivos y valiosos. De forma vehemente, expresó su molestia ante quienes denigran a la nación, afirmando que Argentina es "un país maravilloso que tiene que ponerse de acuerdo".

En cuanto a sus propuestas, el candidato se comprometió a priorizar el trabajo y brindar apoyo a aquellos en la economía informal, subrayando la necesidad de elevar salarios y el poder adquisitivo de la población. Reconoció la necesidad de corregir las deficiencias del actual sistema distributivo.

Asimismo, Massa apuntó a los empresarios al proponer un sistema tributario más progresivo y la implementación de un blanqueo fiscal. Argumentó que una economía formalizada beneficiaría a todos al reducir la carga impositiva en la actividad económica y en los precios al consumidor.

Abordando la cuestión de los jóvenes, el candidato destacó la importancia de reformar el sistema educativo, incorporando materias como matemáticas, programación y robótica. Instó a brindar oportunidades para que los jóvenes se integren al mercado laboral con habilidades actualizadas y especializadas.

Respecto a las mujeres, Massa subrayó su papel fundamental en estas elecciones, donde constituyen la mayoría del padrón. Reconoció la brecha salarial y prometió luchar por la igualdad de remuneración por igual trabajo en el ámbito público y privado. Asimismo, se comprometió a expandir los centros de desarrollo infantil y jardines maternales para apoyar a las madres trabajadoras.

Finalmente, Massa reafirmó su compromiso con la seguridad ciudadana, prometiendo implementar medidas como la instalación de cámaras y botones de pánico en ciudades de más de 50,000 habitantes, con el fin de brindar a los jóvenes la misma seguridad y libertad que él disfrutó en su infancia.

Con un llamado a la unidad y un enfoque pragmático, Massa concluyó su discurso afirmando que si tuviera que volver a nacer, elegiría a Argentina una y cien veces. En sintonía con su partido, Unión por la Patria, apunta a ingresar al ballotage tras las elecciones, donde enfrentaría a Javier Milei, quien se mantuvo como el candidato más votado en las PASO y conserva un sólido respaldo según las encuestas.