Carlos Vicente, miembro de Acción por la Biodiversidad y del grupo GRAIN. “Mirar la foto de Córdoba exige pensar por qué llegamos a esta situación”, planteó
Martes 01 de septiembre de 2020 | 09:29
“El avance del negocio inmobiliario es un agente depredador”
“Hay que contrarrestar la mirada de los medios masivos que hablan de que Córdoba y el Delta “se están quemando”, como si fuera producto de la naturaleza, porque todos estos incendios son intencionales”, señaló. Carlos Vicente, planteó, en entrevista con FM La Barriada.
“Hay una intencionalidad de avanzar con el agronegocio en los humedales y de llevar allí la ganadería, y esto es terriblemente incompatible con estos ecosistemas tan frágiles y únicos en el mundo”, criticó.
“Lo que se está cometiendo es un crimen”, lamentó, destacando los humedales son considerados patrimonio de la humanidad por la biodiversidad que tienen, pero en el Litoral “hay fuertes intereses ligados al agronegocio” que buscan llevar la ganadería a las islas y las zonas de humedales.
En este sentido, explicó que el avance de la soja y el maíz transgénico en gran parte de los territorios donde antes se practicaba la ganadería provocan que esta industria “se vaya desplazando hacia zonas marginales”.
“Las zonas de islas resultan muy atractivas para quienes las quieren invadir y, lamentablemente, para ellos la naturaleza es un obstáculo que buscan destruir para instalar sus proyectos ganaderos”, observó.
“Lo mismo ocurre con los incendios en Córdoba. También son intencionales y, en este caso, en su mayoría son provocados por intereses inmobiliarios para crecer en el desarrollo turístico”, refirió.
CATÁSTROFE AMBIENTAL - VORACIDAD EMPRESARIA
— En Orsai (@EnOrsai) August 30, 2020
Que el humo no nos tape la visión: Los incendios en Córdobahttps://t.co/rJYv0bvJo3
Al respecto, explicó que, según la Ley de Bosques, son “zonas rojas” donde no se puede deforestar, de forma que “el accidente del incendio” da lugar a que desaparezcan y habilita la realización de otros proyectos, ya sean inmobiliarios o del agronegocio.
“El avance del negocio inmobiliario y del agro son un agente depredador de los territorios”, advirtió.
Además, apuntó que “lamentablemente ni las autoridades provinciales ni las nacionales han estado a la altura de frenar esta depredación”, y opinó que la Ley de Humedales “está avanzando a fuerza de la pelea de la gente pero no porque haya una voluntad política fuerte”.
“Necesitamos tener una visión ecosistémica que nos exige pensar en lo que estamos haciendo con el ecosistema planetario”, manifestó.
“Todo es parte de un problema global”, aseguró, explicando que la destrucción del sistemática e intencional de los ecosistemas constituye un “ecocidio”.
“Es una realidad dramática pero muy concreta. La humanidad está realizando un ecocidio sobre la naturaleza, y en el centro de esas responsabilidades están las industrias de la agricultura y la ganadería”, recalcó.