El gobierno de Mauricio Macri avanza con un plan sistemático para desprestigiar a la aerolínea de bandera con el objetivo de terminar de entregar el mercado aeronáutico argentino a empresas privadas. Con ese objetivo avanza en la suspensión de 376 trabajadores, deslegitimando el derecho a huelga y operando los medios para instalar una visión negativa de la opinión púbica sobre la empresa y sus empleados. Sin embargo un informe internacional demuestra la importancia de Aerolíneas Argentinas en la economía nacional a través de la generación de empleos directos e indirectos, fomentando el consumo y la reactivación económica, favoreciendo a las industrias regionales con consecuencias favorables en el Producto Bruto Interno del país.

Sólo tres países de Latinoamérica han logrado sobrevivir al oligopolio de LATAM, AVIANCA y COPA en sus mercados aeronáuticos. En ese cielo, Argentina se destaca por la fortaleza de su línea de bandera. Ante la nueva embestida del Gobierno –que incluye forzar el conflicto gremial incumpliendo acuerdos salariales- los trabajadores de Aerolíneas llamaron a un paro para el próximo lunes pero expresaron claramente: “No es sorpresivo, es anunciado, y tenemos la voluntad de acordar antes las cuestiones pendientes”.

Desde su estatización en 2008, Aerolíneas Argentinas emprendió un viaje de gran prestigio internacional, que en 2012, durante la presidencia del actual legislador Mariano Recalde, la llevó a ser el primer miembro sudamericano en integrar la ALIANZA SKY TEAM, de la que aún forma parte. Hoy, a pesar de los esfuerzos del actual gobierno en impedirlo, Aerolíneas Argentinas sigue siendo una empresa fuerte y competitiva.

En una de sus últimas declaraciones, el 11 de noviembre, el Presidente de la Nación Mauricio Macri atacó a Aerolíneas Argentinas para justificar la falta de inversiones, luego de las graves inundaciones producidas en la Provincia de Buenos Aires.

Alicia Castro, la ex embajadora Argentina ante el Reino Unido entre 2012 y 2015 fue además Secretaria General de la Asociación Argentina de Aeronavegantes entre 1991 y 2003 y afirma que “Macri miente cuando dice que Aerolíneas Argentinas es un gasto porque tendría que decir que el Estado está subsidiando a Norwegian Airlines, Avianca y Flybondi”. Además, Castro explica que Aerolíneas Argentinas es “una herramienta estratégica de desarrollo de nuestro país y a nivel geopolítico”.

Estos son los principios con los que gestiona el presidente de Aerolíneas Argentinas, Luis Malvido. Para este Gobierno, lxs trabajadorxs son variables de ajuste y los despidos una herramienta de coerción. pic.twitter.com/jcDOTi7fdy

— Martín Sabbatella (@Sabbatella) 22 de noviembre de 2018

Todas estas declaraciones en contra de la compañía, en boca del Presidente de la Nación violan la ley 26.466 (“Declárense de Utilidad Pública las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral”), que en su artículo 3º detalla: “Para garantizar la prestación de los servicios, su ampliación y mejoramiento, el Poder Ejecutivo nacional instrumentará los mecanismos necesarios a los fines de cubrir las necesidades financieras derivadas de las empresas mencionadas en el artículo 1º de la presente ley, acorde al artículo 26 de la Ley 26.422 de Presupuesto de la Administración Pública Nacional”.

Lo mismo ocurre con el actual Presidente de Aerolíneas Argentinas, Luis Malvido, que insiste en instalar una inexistente quiebra virtual de la empresa. El término “quiebra” no es azaroso, ya que la opción de privatizar no es posible. Lo prohíbe taxativamente la Ley 26412 en su Art. 9 “En ningún caso el Estado nacional cederá la mayoría accionaria de la sociedad, la capacidad de decisión estratégica y el derecho de veto en las decisiones de la misma”. Entonces, la opción para habilitar el dominio del mercado por parte de empresas privadas es quitar del medio a Aerolíneas Argentinas con maniobras que permitan debilitarla desde lo financiero y ante la opinión pública, para que LATAM, AVIANCA y COPA, absorban la totalidad del mercado aeronáutico argentino.

Desde el inicio de la gestión presidencial, Mauricio Macri y sus funcionarios han intentado instalar mediáticamente un consenso negativo en la opinión pública respecto a la Aerolínea de bandera. Pero el problema es cómo se gestiona la compañía: ¿se gestiona para que crezca, o se gestiona para que quiebre?

Otra estrategia es la baja de pasajeros en los últimos meses pero ¿Por qué ocurre esto Algunas situaciones que se vienen denunciando en los últimos tiempos ofrecen una idea acerca del objetivo del gobierno:

– El Estado renuncia a rutas aéreas que luego toman las privadas. Se decide desde la gestión la suspensión de la operación de varias rutas con gran demanda de pasajeros: Buenos Aires-Barcelona; Córdoba-Miami; Buenos Aires-Brasilia. Una vez que se retiró Aerolíneas Argentinas, todas fueron tomadas por empresas extranjeras (Iberia, American Airlines) y aumentaron las frecuencias.

– Restricción deliberada de las operaciones internacionales desde Aeroparque. Afecta principalmente a Aerolíneas Argentinas, ya que cubre el 50% de las operaciones internacionales.

– Tarifas por debajo del mercado de nuevas empresas low-cost, imponiendo competencia desleal violatoria de la ley 19030.

Gustavo Lipovich, director del Instituto de Investigación y Desarrollo del Transporte Aéreo, explica que “las tarifas bajas que se ofrecen no llegan a cubrir los costos. El presidente de FlyBondi reconoció que pierde plata todos los meses”. ¿Por qué ocurre esto? “De esta manera las empresas privadas atraen al usuario con tarifas bajas y obligan al dueño de la otra línea aérea a bajar los precios. Lo que termina ocurriendo es que ni una línea puede cubrir sus costos y tampoco las otras pueden intentar emparejarlas. Lo que se provoca es que todo el mercado tenga problemas de sustentabilidad económica. Ahí hay una apuesta de la empresa privada a sobrevivir con determinada espalda financiera, esperando que la competencia sea eliminada, abandonando la ruta, quebrando o siendo comprada. Una vez que sucede eso, los precios vuelven a subir y mucho más que antes, porque necesitan recuperar todo lo que perdieron los primeros años”.

En definitiva, el ciclo termina sin una aerolínea de bandera, con tarifas más altas que antes, menos accesibles al usuario y un mercado cooptado por dos o tres empresas que acuerdan precios para obtener la mayor ganancia posible. Esto ya pasó en Brasil y el resultado fue que de 180 destinos originales, en la actualidad sólo se ofrecen 120 (los que el mercado entiende más rentables).

Más allá de la evidente competencia desleal o dañina, esta práctica está prohibida por el art. 24 de la ley 19030 de transporte aerocomercial: “No se permitirá a un explotador de bandera extranjera aplicar tarifas inferiores a las vigentes para el transportador nacional en similares servicios. A servicios equivalentes deberán siempre corresponder iguales tarifas.”

Aerolíneas Argentinas es la herramienta aerocomercial que tiene el Estado para lograr que el transporte aéreo lleve adelante el desarrollo económico hacia todas las regiones del país. Por ende, es ventajoso y conveniente que existan subsidios y aportes del Estado a la línea de bandera, ya que las economías regionales de nuestro país se ven beneficiadas por esta inversión.

Así lo confirma un informe de Oxford Economics de noviembre de 2015 al destacar que:

Aerolíneas Argentinas realiza conexiones vitales tanto a nivel nacional como a nivel mundial, atendiendo a 9,4 millones de pasajeros en 2014 y con el objetivo de transportar cerca de10.5 millones en 2015 en todo el mundo.

En 2014, Aerolíneas llevó aproximadamente 694,000 viajeros internacionales a Argentina: aproximadamente el 27% de todos los viajeros internacionales.

En Argentina es además la principal aerolínea operando con el 71% de los pasajeros nacionales en 2014.

El informe señala que Aerolíneas realiza una contribución sustancial a la economía argentina que se puede cuantificar en términos de su contribución al producto interno bruto (PIB) y al empleo.

En 2014 la empresa empleaba a 11.200 trabajadores en el país, y sólo en ese año las operaciones de Aerolíneas fueron de un total de US$ 1.7 mil millones (dólares). Esto contribuyó al sostenimiento de unos 41.100 puestos de trabajo para la economía argentina y en términos de costo-beneficio implicó que por cada dólar que gastaba la empresa, ingresaban 2,7 dólares de beneficio adicional de valor agregado.

Los servicios de la aerolínea facilitan los negocios, fomentan la inversión extranjera, estimulan el turismo y fomentan el comercio, elevando así la productividad y la prosperidad del país, señala el informe británico.

Representa un ingreso de US$ 2.6 mil millones para el Producto Bruto Interno (PBI) con fuerte impacto en los sectores de transporte (30% de los $ 2.6 mil millones), manufacturas (20%), hoteles y restaurantes (7%).

El informe confirma que Aerolíneas continúa dominando el transporte aéreo nacional de pasajeros de Argentina. En 2015 representó el 74% de los vuelos nacionales transportando el 75% de pasajeros (tanto nacionales como extranjeros). Y en 2014 la participación de Aerolíneas en las salidas domésticas en Argentina fue del 70%, transportando al 71% de pasajeros en vuelos nacionales.

CON ALEGRÍA
¿Macri subsidia de manera encubierta a las aerolíneas low cost?https://t.co/SGPcpS0PfP pic.twitter.com/2z4iKzpFqx

— En Orsai (@EnOrsai) 24 de noviembre de 2018

Impacto directo

El impacto económico directo de Aerolíneas incluye a sus empleados, sus salarios, sus ganancias corporativas e impuestos pagados directamente por la empresa.

La contribución directa de Aerolíneas a la economía argentina ascendió a US$ 438.5 millones de dólares en el PBI de 2014. Con un gasto de $ 581.7 millones de pesos en salarios de empleados y $ 64.8 millones de pesos en impuestos directos.

Los empleados de Aerolíneas son por lo general altamente calificados con un conjunto diverso de habilidades. Estos incluyen representantes de servicio al cliente, (a menudo bilingües y capaces de interfaz con clientes internacionales), pilotos, mecánicos, ingenieros informáticos y programadores. Además de los empleados directos de Aerolíneas, la compañía desarrolló 29.900 empleos adicionales distribuidos en todo el territorio argentino.

Impacto

En 2014, Aerolíneas empleó indirectamente a 12.600 trabajadores a través de su cadena de proveedores. Como resultado de los empleados de Aerolíneas y de sus proveedores, gastando sus salarios, el impacto inducido de las operaciones de Aerolíneas generó 17.300 empleos y una contribución de US$ 549.1 millones de dólares al PBI.

Tomando los impactos directos, indirectos e inducidos juntos, el impacto central total de Aerolíneas para la economía argentina asciende a US$ 1.7 mil millones de dólares en 2014, aproximadamente el 0,31% del total de la economía argentina (sobre un PBI de US $ 540 mil millones de dólares en 2014).

Una comparación del impacto total con el impacto directo revela cómo, por cada 100 dólares de la producción de valor agregado creada dentro del propio sector de la aviación, se crean 294 dólares de valor agregado en otros sectores de la economía de Argentina como resultado de la cadena de suministro y los impactos del gasto de los empleados.

En términos de empleo, Aerolíneas produjo unos 41,100 empleos a través de canales directos, indirectos e inducidos. Aproximadamente 1.7 veces el número empleado directamente en el sector pesquero (24.000) y el 56% del número de empleados directamente en minería (73.500). Por cada trabajo directo de Aerolíneas, se admiten otros 2,67 puestos de trabajo en otros lugares de la economía argentina debido a la cadena de proveedores y los efectos secundarios de los empleados.

Viajeros nacionales

A diferencia de los viajeros procedentes del extranjero, el gasto de los viajeros nacionales no representa dinero nuevo que ingresa a la economía argentina. Sin embargo, ese gasto que realizan respalda a las industrias particulares de la economía argentina.

En 2014, Aerolíneas transportó aproximadamente 3.261.000 viajeros domésticos en Argentina, o aproximadamente el 74% de todos los viajeros nacionales en Argentina. Los viajeros de Aerolíneas gastaron aproximadamente US$ 1,61 mil millones de dólares en bienes y servicios en Argentina, incluida su tarifa aérea nacional, o un promedio de US$ 490 dólares por viajero.

En 2014, la contribución total de las operaciones de Aerolíneas al PBI fue de $ 1,726 millones, contabilizando el 0,32% del PBI argentino. La contribución de los viajeros nacionales fue de$ 1.632 millones de pesos que representaron el 0.30% del PBI mientras que los viajeros extranjeros aportaron $ 908 millones de pesos, el 0,17% del PBI.

Turismo

El turismo es una forma crucial en la cual la conectividad de Aerolíneas beneficia a Argentina. En 2014, Aerolíneas llevó a Argentina a 694.000 viajeros internacionales que gastaron aproximadamente unos US$ 738 millones de dólares en bienes y servicios. Este gasto dio soporte a 28.000 empleos en la Argentina. Además, en 2014, Aerolíneas llevó aproximadamente a 6.6 millones de pasajeros nacionales que gastaron aproximadamente US$ 1.6 mil millones de dólares en bienes y servicios en Argentina, dando soporte a aproximadamente 63,200 empleos.

Oxford Economics es una empresa surgida en 1981 desde la Universidad de Oxford para proporcionar previsiones económicas y modelos a empresas e instituciones financieras del Reino Unido en su expansión hacia el extranjero. Desde entonces, se ha convertido en uno de los asesores globales independientes más importantes del mundo proporcionando informes, pronósticos y herramientas analíticas en 200 países, 100 sectores industriales y más de 3.000 ciudades. Con capacidad para pronosticar las tendencias del mercado externo y evaluar sus impactos en los aspectos económicos, sociales y empresariales.

El informe de Oxford Economics concluye que Aerolíneas Argentinas realiza una contribución central al PIB y al empleo en Argentina. El comercio, los negocios, el turismo y otras actividades económicas que permiten sus servicios, generan un impacto extenso y creciente en la economía nacional. Eso es lo que el gobierno de Macri está destruyendo.

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LARRETA S.A.
En la ciudad mas rica del país, la pobreza creció un 14% y el hambre se expandió un 52%https://t.co/tAhl5OvlKq pic.twitter.com/vL3qmz4Ws1

— En Orsai (@EnOrsai) 25 de noviembre de 2018