Macri lo sabía; Vidal, lo sabía; Durán Barba, lo sabía; Magnetto, lo sabía, Marcos Peña, lo sabía.

(Por Héctor Sosa(*)) El gobierno tomó varias determinaciones de fondo: aplicar a rajatabla una "Comunicación de Guerra Permanente", reprimir duramente a distintos sectores de las sociedad argentina, seguir con la ortodoxia ultraliberal en economía y motorizar acciones como la de ayer en Santa Cruz, donde se pudo apreciar una combinación perfecta de horarios, ataques a la residencia de la gobernadora, esperar que llegue la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner; y tener una artillería de trolls combinada con los equipos enviados por el Grupo Clarín y el Grupo Vila Manzano (América), entre otros, para armar un escenario casi de rebelión popular con aroma a Hollywood. Lo de ayer es el ejemplo perfecto de la construcción de la mentira.

La gobernación de Alicia Kirchner no viene recibiendo el aporte del Estado Nacional por razones obvias: cuñada de la ex presidente. Por tanto, se atrasaron algunos pagos a estatales. No a todos. Un blog OPPI, comenzó a decir que no les pagarían a nadie y que la gobernadora estaba por huir. Extrañamente, ya estaban en el lugar equipos completos de Canal 13 y América 2, también Canal 26, e incluso uno de los cronistas del TN armó una escenografía, cual director de teatro, para que cuando se saliera al aire la gente cantara y puteara a los funcionarios. Los manifestantes iban llegando y comenzaron a romper parte de la residencia gubernamental, a sabiendas que había un niña de 18 meses adentro.

Macri lo sabía; Vidal, lo sabía; Durán Barba, lo sabía; Magnetto, lo sabía, Marcos Peña, lo sabía.

Ya no hay marcha atrás. Macri y su núcleo duro planteó la "guerra" a la democracia: decidió ataques selectivos, con fuego real y ataques masivos con artillería virtual.

Los objetivos principales son los trabajadores, los grupos, entidades, organizaciones y personalidades del gobierno anterior, y lo que se denomina "LOS K"; a quienes colocan en el lugar de haber "dejado en ruinas" el país. Sin decir y anulando- con un blindaje cómplice de los medios- todas las conquistas sociales logradas.

Pero a no dar muchas vueltas: el objetivo principal es CFK.

Los hechos de Santa Cruz son técnicas de elaboraciones pensadas para desestabilizar gobiernos. Son estrategias de guerra de "baja intensidad", con una enorme capacitación de sus ejecutores, tanto en la represión callejera como en la intervención de los nuevos “fierros” de éste mundo: los medios de comunicación concentrados, pertenecientes al poder real.

No olvidar que buena parte de las fuerzas de represión de Macri son entrenadas por el ejército de Israel. Y no olvidar que medios como el Grupo Clarín, y el Grupo América, tienen conexión directa con los centros de capacitación en manipulación informativa, la mayoría de ellos montados en los Estados Unidos.

No es menor lo que está pasando. No es un juego. Así se comenzó en otros países.

El dato duro que más preocupa al fascismo liberal argentino es el siguiente:hay 11 encuestadoras (incluidas las relacionadas al gobierno) que dan un amplio margen de triunfo a Cristina en provincia de Buenos Aires con promedios que van del 37 al 43%. Pero, lo que más los alarma es que en barrios pobres del GBA, Rosario, Mar Del Plata, Córdoba y Tucumán, el porcentaje se eleva a 58% / 65%, según barrio y ciudad.Entre ellas:

Ibarometro S.A.

Management & Fit Consultora de Opinión SRL

Grupo Mercado

Carlos Fara & Asociados

IBOPE INTELIGENCIA S.A.

Julio F. A. Aurelio S.A.

Ricardo Rouvier & Asociados

Hugo Haime & Asociados

Poliarquía Consultores S.A.

Como bien señalaron varios medios en las redes, ya es tiempo de estar en ESTADO DE ALERTA COMUNICACIONAL.

Y, a la vez, tener un nivel de atención superior, fuerte y con observaciones detalladas, de cómo el gobierno de Macri va llevando a la sociedad a un estado de confrontación real, quizás sin retorno.

(*) Editor de La nave de la Comunicación y Motor Económico www.motoreconomico.com.ar

Docente/ Especializado en manipulación informativa.