Elisa Carrió tiene un manejo magistral de la agenda de los medios. Cuando se supo que Néstro Grindetti, el cajero de Macri, sería procesado por enriquecimiento ilícito, la diputada avanzó contra la Procuradora General de la Nación. ¿El objetivo? Transformar al Ministerio Público en una cueva macrista.
Martes 28 de junio de 2016 | 20:07
Alejandra Gils Carbó es la Jefa de los fiscales y el macrismo, desde el día que asumió, busca sacarla de su cargo con cualquier excusa. El objetivo que es el Ministerio Público a cargo de Gils Carbó deje de impulsar investigaciones de corrupción del macrismo.
El objetivo es claro: transformar al ministerio que persigue el delito, en un espejo de la oficina anticorrupción, es decir, ponerlo en manos de una militante del PRO que en lugar de oficiar de fiscal contra la corrupción, le explique a los hombres del macrismo cómo hacer para que la Justicia no los agarre con las manos en la masa.
"Gils Carbó, ya ejerciendo su cargo de procuradora general, llevó a cabo una serie de conductas irregulares que ameritan el presente pedido de juicio político", lanzó Carrió en el texto del proyecto que también firmaron el presidente del bloque de diputados que responde a Macri, Mario Negri (UCR) y los diputados nacionales Fernando Sánchez, Alicia Terada (CC ARI), Silvia Lospennato (PRO) y Jorge D'Agostino (UCR).
El macrismo, con apenas seis meses de gestión en el ámbito nacional, tiene groseros escándalos de corrupción que golpean al exministro de Hacienda de Macri en la Ciudad, Néstor Grindetti, al ministro de Energía, Juan José Aranguren y al propio Presidente de la Nación.
"Actualmente cuenta con varias denuncias penales en su contra por haber entorpecido investigaciones judiciales que afectaban los intereses del anterior gobierno nacional y, además, por haber designado fiscales ilegalmente, es decir, sin haber cumplido el procedimiento contemplado en la ley Orgánica del Ministerio Público", agrega el comunicado del macrismo que rubricó Elisa Carrió.
El macrismo enfrenta una caída grave en la imagen de gestión y necesita extender en los medios la vida de los casos de corrupción vinculados al gobierno anterior. Tras ese muro de contención sólo quedará la inflación, la pérdida de empleo y la mentira del segundo semestre. Se acabó la tregua con la ciudadanía.