El Presidente difundió en sus redes un video en que se muestra en un nuevo pabellón de Exactas en la UBA y sugiere que es una obra de su gobierno, que se habría iniciado y terminado dentro de su mandato. Sin embargo, la gestión del proyecto empezó en 2006 y concluyó en octubre de 2015. Además, la visita la hizo a escondidas, sin permiso y en un feriado.
Viernes 12 de julio de 2019 | 08:07
Fake news en campaña
Otra mentira de Macri: quiso quedarse el rédito de una obra en la UBA que en verdad se ideó y financió con Cristina
El derrotero de anuncios positivos que el Gobierno vendió como propios pero fueron realizados por la anterior administración nacional ocurrido durante los más de 40 meses de gestión de Juntos por el cambio -anteriormente Cambiemos- es amplísimo, pero ahora, en plena campaña electoral, adquiere mayor relevancia, se convierte en una nueva fake news y parece que se trata de una costumbre que no se detiene.
Es que hace solamente tres días, cuando ya había comenzado formalmente la campaña electoral en la que los argentinos decidirán quién será su prósimo presidente, Mauricio Macri mintió otra vez: el candidato a continuar en la Casa Rosada por Juntos por el cambio quiso quedarse con el rédito de una obra en la UBA que en verdad se proyectó, gestionó, financió, licitó y adjudicó durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner.
El lunes 8 de julio, a horas del comienzo de la campaña, Macri visitó las obras del nuevo pabellón de la Ciudad Universitaria de la UBA, llamado Edificio Cero + Infinito, asignado a su Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Allí, filmó un video que su aparato comunicacional difundió a través de las redes sociales, en las que se lo muestra orgulloso y en un evidente mensaje que sugiere que se trata de una obra de su gobierno.
"¿En cuántos meses se hizo la obra?", le pregunta el mandatario en un fragmento editado abruptamente a Bruno, la persona que aparece en el video mostrándole la construcción, quien le responde que se hizo "en dos años y seis meses". Es decir, el Gobierno busca abiertamente sugerir que es una obra de Juntos por el cambio, que se habría iniciado y terminado en 2 años y medio dentro del mandato de Macri.
Según reveló Página 12 a través de un artículo firmado por el reconocido investigador de Conicet y justamente profesor de Exactas en la UBA Alberto Kornblihtt, todo el proceso para la construcción del pabellón universitario que visitó y quiso autoendilgarse Macri se realizó entre 2006 y 20015, en el rango de las gestiones de Néstor y Cristina Kirchner.
La gestión del edificio Cero + Infinito comenzó en 2006, mientras que el estudio de factibilidad fue realizado entre 2008 y 2010. Luego, el 18 de febrero de 2011 CFK recibió en su despacho al arquitecto uruguayo diseñador de la construcción Rafael Viñoly y a Sebastián Ceria, un graduado de la facultad que apoyó el proyecto desde su inicio.
CAMPAÑA SUCIA DE CAMBIEMOS
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El proyecto avanzó con el apoyo explícito de la expresidenta. Entre 2012 y 2014 el entonces ministro de Ciencias y Tecnología (hoy secretario) Lino Barañao tramitó el financiamiento externo y, luego, en 2015 el ex ministro de Economía Axel Kicillof aprobó el crédito del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) que puso el dinero para la obra. Finalmente, el proyecto se licitó en julio de 2015 y fue adjudicada en octubre de ese año.
LA VISITA DE MACRI: TRUCHA, A ESCONDIDAS Y SIN PERMISO
Por si ya no se tratara de una mentira por omisión, lo cual constituye una fake news, el video que el aparato comunicacional de Juntos por el cambio mostró a través de redes sociales se produjo a través de una visita de Macri a escondidas, sin la comunidad educativa presente, sin permiso ni lops anfitriones formales que deberían haber sido de la partida.
Kornblihtt también desnudó en P12 que la visita de Macri al nuevo pabellón de la UBA se realizó durante un feriado en que la institución pública se encontraba sin estudiantes ni profesores, sin los anfitriones naturales de la casa de estudios, como son el rector de la Universidad y el decano de la facultad. Una interpretación posible es que, de estar haber estado presente la comunidad educativa, podría haber incomodado al mandatario con reclamos por las políticas de ajuste en ciencia, educación y salud de su gobierno.
Además, Macri ingresó a Ciudad Universitaria porque algún "empleado de menor rango del ex-Ministerio de Ciencia" le abrió las puertas a una dependencia de una institución, como una universidad pública, que tiene autonomía por ley nacional.
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