La inauguración del Centro de Ensayos de Alta Tecnología (CEATSA), que llevó adelante ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, sirvió para mostrar los desarrollos tecnológicos más importantes que impulsa el gobierno nacional, encabezados por los satélites en el área de las telecomunicaciones. El ministro de Planificación, Julio De Vido, le confirmó a Tiempo Argentino que el gobierno nacional invertirá 6400 millones de pesos en 2014 para poner en órbita el satélite Arsat-1 (que ayer inició sus pruebas) y continuar con el desarrollo del Arsat-2 y el Arsat-3. "Argentina es el único país de Sudamérica que construye satélites de telecomunicaciones que brindarán servicios de telefonía de datos, Internet y televisión. De esta forma ingresa a un selecto grupo que integran Estados Unidos, Alemania, Rusia, China, Francia e Italia", planteó el titular de la cartera de Planificación.

El ministro sostuvo además que la política de telecomunicaciones del Estado Nacional lleva ejecutados 15 mil millones de pesos desde 2003 hasta la actualidad y creó 27 mil puestos de trabajo directos en política de comunicaciones a los que se suman otros 20 mil puestos indirectos en otras áreas de la industria. "Como parámetro, todo el sector de telecomunicaciones en la Argentina incluyendo el sector privado, invirtió $ 31 mil millones desde 2003 y ocupó a 107 mil personas de forma directa", explicó para mostrar el importante aporte del Estado.

¿En qué se ve traducida la fuerte inversión para desarrollos tecnológicos en el área de comunicaciones? El titular de Arsat, Matías Bianchi, le contó a Tiempo Argentino que la empresa estatal tiene principalmente tres proyectos que trabajan en conjunto para mejorar la conexión de los habitantes de la Argentina: el proyecto satelital, la extensión de la red de fibra óptica y el acercamiento de la televisión digital abierta a todo el país.

Desde el costado satelital, la Argentina tendrá al llamado Arsat-1 en funciones dentro del segundo trimestre del año que viene. Este va a remplazar las funciones de un satélite que el país actualmente alquila, con lo que mejorará la ecuación económica y la proyección a futuro agregando algo de capacidad. Además, convierte a la Argentina en el séptimo país del mundo con capacidad de lanzar un satélite de más de 3000 kilos.

En tanto, el Arsat-2 se lanzará en 2015 y tendrá el objetivo de aumentar la capacidad y la oferta aseguradas por el primer satélite. "Es un satélite que en vez de una tiene tres antenas y ya estaría cubriendo parte de América del norte y latinoamérica. Además, tendrá una banda exclusiva para el contenido de imagen ya que el país hoy genera el 75% de los contenidos de habla hispana de Sudamérica y la idea es potenciar esa generación para distribuirlo", explicó Bianchi.

De Vido adelantó que los 6400 millones de pesos que se invertirán el año que viene apuntarán a esos grandes objetivos. En primer lugar la colocación en órbita del satélite Arsat-1, la terminación del Arsat-2 y el incio de la construcción del Arsat 3. Luego también se generarán vehículos experimentales para terminar en 2015 el cohete Tronador II, que permitrá colocar en órbita satélites de observación de la tierra a 600 kilómetros y de hasta 250 kilos.

En ese sentido tanto Arsat como la Conae firmarán contratos con el Invap para confirmar los avances. También se están negociando los satélites SAOCOM con Italia y SABIAMAR con Brasil; la instalación de 35 nuevas estaciones de Televisión Digital Abierta; 700 mil nuevas "terminales de acceso al conocimiento" para que los hogares puedan conectarse con la red de fibra óptica; 20 mil kilómetros nuevos de red de fibra óptica; y la aplicación del Centro de Datos de Benavídez, que es el centro de datos más grande de toda sudamérica.

"Las cifras de conexión en Argentina continuarán creciendo ampliamente y transformándose al ritmo del cremiento del país, planteando un claro desafío para toda la industria. El Plan de Telecomunicaciones de esta gestión de gobierno permitió que el Estado Nacional pase a ocupar un rol central de planificador geopolítico de esta política", sostuvo el ministro De Vido.

El ministro también destacó en diálogo con este diario que actualmente existen 75 estaciones de televisión digital que otorgan cobertura al 85% de la población con 1,3 millones de decodificadores entregados. "En septiembre de 2012 se asignó el 25% del espectro radioléctrico a Arsat, lo que plantea un claro desafío a las empresas para que avancen hacia nuevas tecnologías, como por ejemplo la 4G que la sucesora de la 3G", subrayó el funcionario.

Por su parte, Bianchi indicó a este diario que en los temas de comunicaciones e Internet se le está dando un interés central a lograr la conectividad de escuelas rurales y de determinados organismos que tienen también presencia en zonas remotas, como pueden ser Gendarmería o la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). "En algunas escuelas rurales ya se están realizando pruebas de Internet y Televisión Digital Abierta, además de telefonía sobre IP. Y a veces son lugares que hasta hace muy poco tiempo no tenían ni energía eléctrica", apuntó el titular de Arsat.

Bianchi también apuntó que los planes de Arsat son complementarios entre sí. Según explicó, la extensión de la red de fibra óptica llevará a alcanzar a más del 90% de la población del país, pero el porcentaje será completado totalmente con el lanzamiento de los satélites. Justamente Arsat-3, el satélite que estaría en órbita recién en 2017, se enfocará en brindar servicio con de Internet con calidad ADSL para zonas aisladas donde no llega la fibra.