El retorno de Bullrich al horizonte de la seguridad nacional bajo el gobierno de ultraderecha de Javier Milei ha desencadenado reacciones rápidas, siendo Villaruel quien, en un inesperado gesto, se mostró junto a altos mandos de la Policía Federal, dejando en claro su postura respecto al compromiso con quienes protegen la vida y los bienes públicos.

La vicepresidenta electa expresó su intención de establecer una nueva dinámica, donde los líderes se involucren activamente con aquellos responsables de resguardar la seguridad de la población. Esta visita estratégica surge en medio de fuertes rumores sobre la posible designación de Bullrich como ministra de Seguridad, un cargo que hasta el momento estaba sujeto a la promesa de su compañero de fórmula.

Durante su gestión como ministra, Bullrich adoptó la frase "Cuidar a los que nos cuidan" como emblema, especialmente tras el incidente de la desaparición de Santiago Maldonado durante un operativo de la Gendarmería en Cushamen, Chubut. Este hecho marcó un antes y un después en su enfoque hacia las fuerzas de seguridad, lo que culminó en la creación de la Unidad de Garantía de Derechos Humanos y otras medidas para proteger a los agentes.

La campaña presidencial de Bullrich también estuvo anclada en su compromiso con las fuerzas de seguridad, presentando propuestas de reforma legal para respaldar la legítima defensa de los agentes y limitar el uso excesivo de la prisión preventiva en su contra.

El desenlace de esta confrontación por el control de la seguridad nacional se presenta como un tema crucial para el futuro gobierno, generando incertidumbre sobre quién dirigirá estas carteras y cuál será el impacto en la ciudadanía ante una posible designación.