(Por Redacción EnOrsai) El término factoide significaba originalmente un «hecho» completamente falso, e inventado para crear o prolongar la exposición pública o para manipular la opinión pública. Fue acuñado por Norman Mailer en su biografía de 1973 de Marilyn Monroe.

El propio Mailer describía un factoide como «hechos que no existían antes de aparecer en una revista o diario». Mailer creó el término combinando «facto» (del latín factum, «hecho») con «-oide» que significa "parecido a, pero no igual". (Factoide viene de facto, hecho, y oide, parecido).

El Washington Times definió el neologismo como "algo que parece un hecho, podría ser un hecho, pero en realidad no es un hecho". Se genera por medio de prejuicios cognitivos y da lugar a leyendas urbanas.

Se trata de una mentira mezclada con toques de verdades, una "media verdad" o incluso un "hecho" veraz porque está provisto de cierto fundamento verdadero, aunque es dudoso, no verificado, incorrecto o directamente "fabricado" para parecer un hecho: por ejemplo, la afirmación de que "la Gran muralla china es la única obra del hombre que puede contemplarse desde la luna" o la periodística declaración de la "maldición de los 27 años" que afecta a numerosos artistas de rock y les hace morir a esa edad (Jim Morrison, Janis Joplin, Amy Winehouse...).

????Cuidado!
Esto es un FACTOIDE. Abro hilo????explicando de qué se trata esta táctica publicitaria. pic.twitter.com/dW3BpbwxBN

— Mauro Brissio (@BrissioMauro) January 9, 2023

Bajo la lupa de este concepto observemos la foto viralizada en las últimas horas en las redes sociales que muestra al intendente porteño Horacio Rodriguez Larreta surfeando en el mar. Según Mauro Brissio, Magíster en Comunicación por la UNLaM y especialista en Fake News advirtió sobre la misma que se trata de un FACTOIDE. Una táctica publicitaria.

Esto ¿Qué significa? se preguntó Brissio desde su cuenta de Twitter para explicar “que la foto fue hecha a propósito para que se vea la persona que está sosteniendo la tabla de surf. De esta manera, miles de cuentas la compartirán riéndose del “descuido”, cuando en realidad fue todo planeado.”

Agregando, “¿realmente ustedes creen que a los miles de profesionales de la Comunicación, Publicidad y Marketing se le iba a escapar la pelada del tipo? Por favor, no seamos ingenuos. Ellos son los genios de la comunicación.”

“Hoy no interesa que que se burlen de él o lo feliciten. Hoy lo único que interesa es que se destaque, incluso con una imagen controvertida para hacerse viral. Es preferible ser difamado y agredido que ignorado”, señaló Brissio.

Según el Diccionario de Inglés de Oxford define al factoide como "un elemento de información confiable, repetido tan a menudo, que se acepta como un hecho". Estos pueden dar lugar a conceptos erróneos comunes y leyendas urbanas, o derivar de ellos un tipo de desinformación.

La trampa de los factoides es hacernos creer un hecho real que no lo es, por ficticio, imaginario, inventado, o falaz. Esto ocurre con la ayuda de los medios de comunicación y las redes sociales que ayudan a propagar factoides encontrados en titulares, conjeturas, promesas, anuncios engañosos, ilusiones o distractores.

El caso de la fotografía de Larreta en surf donde se puede observar a su instructor sosteniendo la tabla y que fue reproducido en tono de burla miles de veces, logró plenamente el objetivo. Como expresó Brissio, “básicamente, es darle prensa gratis.”

Si pudieramos contabilizar las visualizaciones logradas por la publicación de Larreta y compararla con la totalidad de visualizaciones logradas por las diferentes publicaciones donde se reían de él, porque era sostenido por una persona, llegaríamos a la siguiente conclusión. Sin poner un peso la imagen del jefe de gobierno porteño se mantuvo visible en las redes sociales con un altísimo nivel de exposición.

Como conclusión podemos decir, que la foto no fue un error de prensa, es algo estudiado y realizado con premeditación para alcanzar con un mínimo esfuerzo la mayor difusión posible. Los detractores de Larreta le dedicaron múltiples publicaciones burlándose del supuesto error que no fue más que aumentar la visibilidad del intendente porteño y que en las redes la imagen se mantenga casi al nivel de los preocupantes sucesos ocurridos en Brasil.