Hasta hace pocos días el escenario aseguraba que Macri conseguiría su cometido, ubicando a Pablo Tonelli y Mario Negri como representantes por la mayoría en el Consejo de la Magistratura, gracias al apoyo de los jefes del PRO, la Unión Cívica Radical (UCR), la Coalición Cívica, el bloque de Martín Lousteau, Alma Sapag, Alfredo Olmedo, Beatriz Ávila, Eduardo Brizuela y los diputados puntanos y misioneros. De esta manera, sumaría 121 votos.

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Allí es donde se tornó clave la figura de Schiaretti quien recibió reiteradas llamadas del mismísimo Presidente de la Nación para lograr su apoyo. Sin embargo, el gobernador cordobés decidió unir filas con el Frente para la Victoria (FpV) y el Frente Renovador (FR) logrando los 131 puntos que sepultaron las intenciones del macrismo. De esta manera, se impusieron los nombres de Eduardo Wado de Pedro (FpV) y Graciela Camaño (FR) como consejeros titulares mientras que los suplentes serán Vanesa Siley (FpV) y Martín Llaryora, discípulo político de Schiaretti en Unión por Córdoba (UPC).

Cabe mencionar que además de los diputados de San Luis y Misiones, tampoco firmaron el acuerdo el Frente de Izquierda, la diputada por Chubut Rosa Muñoz y la cordobesa Adriana Nazario.

Los pasos a seguir por la oposición serían lograr un acuerdo con Alberto Lugones y Diego Molea y evitar que Mauricio Macri pueda tener mayoría para destituir y nombrar jueces, una estrategia altamente valorada por el gobierno nacional desde los inicios de su gestión.

INQUISIDOR
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— En Orsai (@EnOrsai) 16 de noviembre de 2018