Una universidad privada midió la imagen positiva y negativa de los 27 principales funcionarios del gobierno nacional y generó datos sorprendentes tanto en el extremo de los más rechazados como en el de los más aceptados, con números que perjudican a los dirigentes cercanos al Presidente y benefician a quienes tuvieron un pasado ligado a la oposición.
Miercoles 04 de abril de 2018 | 18:23
A más de un año de las elecciones presidenciales que se vivirán en la Argentina en 2019 y mientras en Cambiemos ya empiezan a barajar la triple reelección (Mauricio Macri-María Eugenia Vidal-Horacio Rodríguez Larreta) a nivel nacional, bonaerense y porteño, también empiezan a moverse los nombres y sus hipotéticas chances.
Es así que una universidad privada midió a los principales funcionarios del gobierno central y obtuvo resultados sorprendentes tanto en el extremo de los más odiados como en el de los más aceptados, con un amigo del Presidente en el fondo de la tabla y un hombre que supo integrar la actual oposición al macrismo como el más querido por los argentinos.
La Universidad de San Andrés realizó un sondeo que ubicó a Gustavo Arribas, el jefe de los espías y amigo personal de Macri, como el funcionario del gobierno nacional con peor imagen, con un 71% de opiniones negativas y sólo un 29% de opioniones positivas.
El titular de la Agencia Federal de Inteligencia es investigado por el presunto pago de casi un millón de dólares de coimas en el escándalo del escándalo de corrupción denominado en Brasil como Lava Jato.
En el ránking de los odiados, el hombre ligado al negocio del fútbol es seguido de cerca por Jorge Triaca, el ministro de Trabajo, con una cartera de múltiples problemas que tuvo un clímax con su violento audio en que despidió a una empleada doméstica a la que tenía contratada en negro y le había dado un cargo en un sindicato intervenido.
Luego aparecen el ministro más cuestionado del momento, Luis "Toto" Caputo, y el rabino Sergio Bergman, ambos con un 64% de imagen negativa, frente a un 36% de opiniones favorables. El titular de Finanzas aún no logra escapar, ni en la justicia ni en los medios, del escándalo por sus cuentas offshore favorecidas por el gobierno que integra, mientras que su par de Ambiente protagonizó múltiples papelones, como por ejemplo con su disfraz de planta en un evento público o su pedido de "rezar" para que no haya incendios forestales.
Pero, ¿qué ocurre con los funcionarios nacionales que sí son bien vistos por la gente? En ese caso, el funcionario con mejor imagen positiva y menor cantidad de opiniones perjudiciales es el exkirchnerista Lino Barañao. A pesar de las reiteradas manifestaciones de la comunidad científica en su conjunto contra el ajuste emprendido por su cartera desde la asunción de Macri, el ministro de Ciencia y Tecnología consiguió sólo un 42% de miradas negativas contra un 58% de posturas favorables a su trabajo.
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— En Orsai (@EnOrsai) 2 de abril de 2018
Luego de Barañao, lejano al riñón tanto del PRO como de la Coalición Cívica y el radicalismo, aparecen en el top 4 positivo funcionarios "originarios" de Cambiemos. Se trata del ministro del Interior, Rogelio Frigerio; la titular de Desarrollo Social, Carolina Stanley; y el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
¿Dónde aparecen ubicados los polémicos Juan José Aranguren y Patricia Bullrich? El ministro de Energía, fuertemente rechazado por los interminables tarifazos en los servicios públicos, aparece cerca del fondo de la tabla, con un 62% de miradas negativas contra un magro 38% de guiños favorables. En el caso de su par de Seguridad, siempre en el centro de los conflictos por su aval a la doctrina del gatillo fácil, logró estar en una posición expectante con el sexto puesto: tuvo sólo un 47% de imagen negativa frente a un 53% de opiniones positivas. Fuente: Política Argentina