En apenas nueve meses de gestión, el gobierno de Mauricio Macri ya dejó sin trenes a 104 pueblos y ciudades, una decisión que afecta a más de 670 mil habitantes de distintas poblaciones como Chascomús, Pringles y Basalvilbaso.
diariopulse // Domingo 11 de septiembre de 2016 | 23:48
El diario Tiempo Argentino reveló que el 30 de junio pasado, y de forma sorpresiva, el gobierno bonaerense anunció la suspensión de todos los servicios prestados por la Unidad Ejecutora del Programa Ferroviario Provincial (UEPFP, más conocida por su razón comercial: Ferrobaires), aduciendo razones de seguridad, y “hasta nuevo aviso”.
Lo hizo mientras Macri anuncia un faraónico proyecto ferroviario dedicado exclusivamente al Área Metropolitana.
En el año, los ramales que van a Tandil, 25 de Mayo, Chascomús, Bragado, Junín y Alberdi, a Bahía Blanca vía Pringles y a La Pampa, quedaron vacíos. Tambien se encuentran Coronel Boerr, Cacharí, Hinojo, Las Martinetas hasta Laprida, el lugar de la vicepresidenta Gabriela Michetti.
A Chascomús llegaban dos trenes: el de Ferrobaires desde Alejandro Korn y el semirrápido chino desde Constitución inaugurado en diciembre de 2014. Ya no. “No hay explicaciones. La excusa es la falla en la señalización, pero los trabajadores aseguran que no hay riesgo”, dijo a ese diario el diputado bonaerense José Ignacio “Cote” Rossi (FPV), que presentó un pedido de informes en la Legislatura provincial, aún sin respuesta.
“El plan noventista de Cambiemos para los trenes se complementa con la transferencia de servicios ferroviarios del Estado nacional a provincias y municipios, sin posibilidades económicas y operativas para sostenerlos –como en los ’90–, a contramano de la ley aprobada en 2015 con apoyo del actual oficialismo, que obligaba a recuperar para Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado todos los ramales concesionados a las provincias por Menem”, asegura en un párrafo de su nota Tiempo Argentino.
“Esa es la idea que se pretende aplicar en Neuquén y Chaco. El Tren del Valle, que une Cipolletti y la capital neuquina –e iba a extenderse a Plottier y General Roca– sería la primera víctima de este proceso. Aníbal Tortoriello (CC-ARI), intendente cipoleño, ya avisó que “las arcas municipales no están en condiciones de asumirlo”. Los trenes que circulan por Chaco, que en 2010 habían pasado al Estado nacional, volverían a la provincia si prospera la iniciativa impulsada por el senador Ángel Rozas (UCR)”, agregaron.