Al no convocar sesiones extraordinarias en el Congreso, Mauricio Macri gobernará hasta marzo por decretos de necesidad y urgencia. Ya sancionó más DNU que Cristina Kirchner en sus dos mandatos. Cambio a la Ley de Medios y baja a las retenciones salen vía DNU.
Andrés Brown Redacción En Orsai // Lunes 14 de diciembre de 2015 | 12:05
A lo largo de sus dos mandatos presidenciales, Cristina Fernández de Kirchner firmó 29 decretos de necesidad y urgencia. En cinco días de gobierno, Mauricio Macri ya la superó: acumula unos 40 DNU (algunos casi burocráticos, pero al menos tres muy polémicos) y promete seguir recurriendo a ese método "poco republicano".
El presidente declaró luego de la reunión con los gobernadores que "no están previstas las sesiones extraordinarias para el Congreso". Eso significa que hasta marzo de 2016 el Parlamento no sesionará, por lo que Estado funcionará a base de lo que dicte el Poder Ejecutivo mediante los decretos que firme Macri.
La principal causa que tiene Macri para no convocar a estas sesiones extraordinarias es que no tiene mayoría en ninguna de las dos cámaras del Parlamento.
Así, pese a haber criticado el supuesto autoritarismo de Cristina Kirchner a lo largo de la campaña y de todos los años anteriores, ahora Macri apela a un recurso que se saltea al Congreso y a la discusión entre fuerzas políticas.
Si bien algunos DNU son meras modificaciones formales de gabinete, algunos otros no lo son. "En cuanto llegue a Buenos Aires firmaré el decreto para que haya cero retención a las producciones regionales", afirmó hoy Macri desde Pergamino, donde fue aplaudido por los productores que asistieron a la conferencia de prensa.
La medida alcanzará a toda la producción del campo (trigo, maíz, sorgo, cebada, carne, leche, pesca, etc.) excepto a la soja, cuyo gravamen se reducirá al 30% y luego 5 puntos por año hasta llegar también a cero. Es decir, un cambio impositivo sustancial se sancionará vía decreto.
Por otro lado, el nuevo presidente dispuso que la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) y la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Aftic) dejen de pertenecer a la órbita de la Presidencia de la Nación y pasen a subordinarse al Ministerio de Comunicaciones, a cargo del radical Oscar Aguad.
Además del cambio de órbita, la redacción del DNU modifica en parte la ley de medios, declarada constitucional por la Corte Suprema de Justicia. Desde la Afsca consideraron que la decisión se inscribe en el marco de una estrategia para desplazar a Martín Sabbatella del organismo y beneficiar a las grandes empresas de medios, principalmente el Grupo Clarín.
A su vez, otro decreto polémico ya recibió objeciones duras por parte de los sindicatos de maestros. Los docentes le reclamaron al ministro Esteban Bullrich por un decreto firmado el primer día de gobierno de Cambiemos: el DNU lleva el financiamiento educativo del 6 al 3 por ciento del PBI, no reconoce varias leyes votadas por unanimidad en el Congreso y reinstaura normas del menemismo.
En la reunión que mantuvo Bullrich con los gremios docentes el viernes pasado, el ministro admitió que "fue un error" y se comprometió a rever la norma con el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay. Esta semana, Bullrich prometió que los iba a convocar de nuevo a los representantes de los gremios, quienes advirtieron que será el primer punto a tratar en la reunión. Si no se resuelve la situación, los gremios advirtieron que recurrirán a la Justicia y movilizarán a la comunidad educativa.