En Necochea, un humilde albañil de nacionalidad chilena se quitó la vida de un disparo porque no podía pagar las boletas de luz y gas. Las últimas facturas de esos servicios sumaban poco más de tres mil pesos. "Me voy a matar, ya me es imposible vivir así", expresó antes de tomar la drástica decisión.
Cronica // Martes 07 de junio de 2016 | 08:45
La primera víctima fatal del tarifazo. Invadido por la angustia, por la desesperación de no saber cómo afrontar el incremento de las tarifas de luz y de agua, que en esta oportunidad superaban los tres mil pesos, un albañil se quitó la vida en Necochea.
El hombre, de nacionalidad chilena, hacía un mes que no era contratado para ninguna tarea y, tras recibir las facturas de ambos servicios, decidió suicidarse, determinación que ya le había adelantado a su hermano, quien alertó a las autoridades policiales, la cuales hallaron el cuerpo en la mañana del lunes.
Las sucesivas lluvias, sumadas al descenso de la actividad en Necochea, mantenían en el último mes sin oportunidades laborales a Alberto Luis Guerra, de 30 años, quien se desempeñaba como albañil. La falta de empleo y, por consecuencia, de ingresos desencadenaron un estado depresivo, apremiado por las urgencias económicas que, como le sucede a muchos, se tornaba cada vez más cruda ante cada aumento anunciado. Justamente en los últimos días, su desánimo se profundizó aún más cuando llegaron a sus manos las boletas con las tarifas de luz y gas.
La suma era mayor a los tres mil pesos y fue entonces que su desesperación llegó al extremo. Muy temprano, en la jornada del sábado, partió de su vivienda situado en 531 al 4100, de la ciudad de Necochea, con el fin de encontrarse con su hermano, a quien Guerra le había confesado sus deseos de quitarse la vida, argumentando la imposibilidad de asumir el crecimiento imparable del costo de vida. “Me voy a matar, ya me es imposible vivir así”, fueron las pocas palabras que expresó y se retiró, a pesar de los ruegos de su ser querido por detenerlo. Fue éste quien acudió a las autoridades policiales para solicitar una rápida intervención que pudiera evitar la irreversible determinación del albañil, de nacionalidad chilena.
Desenlace
La última vez que había sido visto fue a las 8.30 de ese sábado y 48 horas después sería hallado en la intersección de 531 y la ribera del río, a siete cuadras de su domicilio.
El cuerpo presentaba un orificio de bala en su cabeza, producto de un disparo en su sien que se efectuó con un arma de fuego hallada a sus pocos metros.
El suicidio de Guerra es fiel reflejo de la extrema situación en materia de tarifas que azota a los habitantes de Necochea quienes, tras conocer el hecho, reforzaron sus reclamos, revelando que una factura de luz promedia los 1.500 pesos.