El PRO cuestiona a los intendentes que permanecen en sus cargos por más de dos períodos, sin embargo en sus filas militan varios que llevan casi dos décadas sentados en el mismo sillón. De Aníbal Loubet a Miguel Ángel Lunghi ¿Quiénes son los macristas atornillados?
Miguel Ángel Lunghi, Intendente de Tandil
Jueves 08 de octubre de 2015 | 13:51
Mauricio Macri encabeza una fuerza política que suele manifestarse contra la reelección indefinida. Con el barniz democrático habitual, el PRO señala a los dirigentes del peronismo que llevan varios años en el poder pero olvida que en sus filas hay algunos de los intendentes con mandatos más extensos, incluso en ciudades de gran peso electoral.
Aníbal Loubet: Intendente de Gral.Guido. Radical histórico que llegó a la Intendencia en 1991. Atravesó dos gobiernos de Carlos Saúl Menem, el traspié de Fernando De La Rúa, la crisis con presidencias efímeras de Puerta, Saá y Camaño, el liderazgo de Eduardo Duhalde, un mandato de Néstor Kirchner y dos de Cristina Fernández de Kirchner.
Como integrante de la alianza macrista Cambiemos se postula a un nuevo mandato cuando ya lleva 6 (seis) consecutivos. Eterno.
Miguel Ángel Lunghi: Intendente de Tandil, una de las ciudades más importantes de la Provincia de Buenos Aires. Como hombre del radicalismo asumió en 2003 y nunca abandonó el cargo. Lleva 12 años en el poder y va por su cuarto mandato para así completar 16 años al frente de la intendencia. Su padre, José Emilio Lunghi fue Intendente de la ciudad entre 1963 y 1966. Casi una tradición familiar.
Gustavo Posse: Intendente de San Isidro desde el 10 de diciembre de 1999 e integrante de una familia que gobierna el distrito desde 1983, heredó el mandato de su padre, Melchor quien había asumido en el retorno de la democracia. Gustavo coqueteó con Massa pero cerró con Macri y ahora integra la boleta de Cambiemos. Aspira a su quinto mandato consecutivo, sin interrupciones.
Enrique Tkacik: Intendente de Hipólito Yrigoyen desde 1995, busca ser reelecto. Integra la boleta de Cambiemos y se mostró con Mauricio Macri tras abandonar a Margarita Stolbizer y el progresismo.
Son varios los radicales que en el interior de la Provincia de Buenos Aires se han reconvertido en macristas para perpetuarse en sus cargos. Otros, como Carlos Gorosito, que gobernaba Saladillo desde 1991, perdieron la interna del frente Cambiemos.