Elisa Carrió se jacta de hacer una campaña sin plata, y hasta en un spot la locutora afirma haber donado sus honorarios. Sin embargo, organiza cenas de recaudación en el Palacio San Miguel, se enorgullece de copar el voto de Recoleta y hace campaña en un avión privado.
Andrés Brown Redacción En Orsai // Jueves 30 de julio de 2015 | 11:02
Los precandidatos presidenciales del frente Cambiemos, Mauricio Macri (PRO) y Elisa Carrió (Coalición Cívica), compartieron hoy un almuerzo en la casa de la diputada, ubicada en Recoleta, mientras definen junto a la UCR los últimos pasos de la campaña antes de las primarias del 9 de agosto.
A once días de las PASO, el líder del PRO y la legisladora nacional se reunieron para compartir un almuerzo en el departamento que tiene Carrió en Barrio Norte, aunque no trascendieron detalles del encuentro.
Lo cierto es que pese a su estilo conforntativo y casi indomable, la PASO de Cambiemos se mantiene fría y demasiado amistosa. Sin críticas de Carrió o Ernesto Sanz contra Macri, el alcalde se encamina hacia un cómodo triunfo.
Mientras tanto, Carrió se jacta de hacer una campaña sin plata. "Vamos a emprender esta campaña al revés de la historia: en un mes y sin dinero. Si ganamos sin dinero haremos la revolución de la paz. Hay que demostrarle a la presidenta que esta sociedad es rica porque no necesita de su dinero", sostuvo Carrió hace unos días.
Sin embargo, la diputada chaqueña se mueve por el país en un avión privado. Así se trasladó y volvió desde Córdoba, donde hizo campaña junto a su vice, el dirigente "pobre y del conurbano", según lo presentó ella misma, como si se tratara de un elogio.
En su tour, a Carrió la acompañan los primeros postulantes a legisladores Hernán Reyes y Marcela Campagnoli (hermana del polémico fiscal José María), así como la aspirante al Parlasur, Mariana Zuvic.
Por otro lado, hace unas semanas Lilita organizó una paqueta cena de campaña. En el Palacio San Miguel, Carrió discurseó ante unos 500 simpatizantes que pagaron 250 pesos el cubierto.
La zona norte de la Capital parece ser el lugar en el mundo de Carrió: de hecho, ella misma se jacta de ser una especie de reina y dueña del voto de Recoleta.
"En el ballottage los votos que le faltaron a ECO fueron votos de la zona norte que me vota a mí y que no vota a Martín Lousteau ", aseguró después de la segunda vuelta porteña.